CIUDAD DEL VATICANO, 10 ENE 2009 (VIS).-Benedicto XVI conmemoró esta tarde en la basílica de San Pedro el 40 aniversario del inicio en Roma del Camino Neocatecumenal, fundado por los españoles Kiko Argüello y Carmen Hernández, y el sacerdote italiano Mario Pezzi.
Participaron en el encuentro 25.000 miembros del Camino. El Papa entregó la "cruz de la misión" a catorce comunidades del Camino, cada una formada por 30-40 personas, que partirán en misión a las zonas más difíciles y secularizadas de la periferia de Roma en ayuda de los párrocos.
"Vuestra presencia -dijo el Santo Padre en su discurso- (…) atestigua los prodigios que ha obrado el Señor en estas cuatro décadas e indica también el compromiso con que queréis proseguir el camino iniciado: un camino de fe y de seguimiento de Cristo, de valiente testimonio de su Evangelio, (…) un camino de dócil adhesión a las directrices de los pastores y de comunión con todos los demás componentes del Pueblo de Dios, (…) bien conscientes de que ayudar a las personas de nuestra época a encontrar a Jesucristo el Redentor del ser humano, constituye la misión de la Iglesia y de todo bautizado. El Camino Neocatecumenal se inserta en esta misión eclesial como uno de los tantos caminos suscitados por el Espíritu Santo con el Concilio Vaticano II para la nueva evangelización".
"¡Cuántas frescas energías apostólicas habéis suscitado entre los sacerdotes y los laicos -exclamó el Papa-; (…) a cuántas familias habéis ayudado, a través del anuncio del kerygma y del itinerario de descubrimiento del bautismo a encontrar la alegría de la fe y el entusiasmo del anuncio evangélico! La reciente aprobación de los Estatutos del Camino por parte del Pontificio Consejo para los Laicos ha sellado la estima y la benevolencia con que la Santa Sede sigue la obra que el Señor suscitó a través de vuestros iniciadores".
"Vuestra acción apostólica, tan benemérita, será todavía más eficaz a medida que os esforcéis en cultivar constantemente la aspiración a la unidad que Jesús comunicó a los Doce durante la Última Cena. (…) Esa unidad, don del Espíritu Santo y búsqueda incesante de los creyentes, hace de cada comunidad una articulación viva y bien insertada en el Cuerpo místico de Cristo. La unidad de los discípulos del Señor pertenece a la esencia de la Iglesia y es condición indispensable para que su acción evangelizadora sea fecunda y creíble".
"Efectivamente en nuestros días hace falta una vasta acción misionera que implique a todas las diversas realidades eclesiales, las cuales, conservando cada una la originalidad del carisma propio, obran en concordancia para realizar la "pastoral integrada" que ya ha hecho posible conseguir resultados significativos. Vosotros, con plena disponibilidad al servicio del obispo, como recuerdan vuestros estatutos, podréis servir de ejemplo a todas las Iglesias locales que miran a la de Roma como modelo de referencia".
El Papa concluyó invitando a los neocatecumenales a "no desanimarse ante las dificultades, a no buscar éxitos humanos, y a no temer incomprensiones e incluso persecuciones", sino a "confiar únicamente en la potencia de Cristo, a tomar la propia cruz, y a seguir las huellas de nuestro Redentor".
AC/40 ANIVERSARIO/NEOCATECUMENALES VIS 20090112 (530)
Participaron en el encuentro 25.000 miembros del Camino. El Papa entregó la "cruz de la misión" a catorce comunidades del Camino, cada una formada por 30-40 personas, que partirán en misión a las zonas más difíciles y secularizadas de la periferia de Roma en ayuda de los párrocos.
"Vuestra presencia -dijo el Santo Padre en su discurso- (…) atestigua los prodigios que ha obrado el Señor en estas cuatro décadas e indica también el compromiso con que queréis proseguir el camino iniciado: un camino de fe y de seguimiento de Cristo, de valiente testimonio de su Evangelio, (…) un camino de dócil adhesión a las directrices de los pastores y de comunión con todos los demás componentes del Pueblo de Dios, (…) bien conscientes de que ayudar a las personas de nuestra época a encontrar a Jesucristo el Redentor del ser humano, constituye la misión de la Iglesia y de todo bautizado. El Camino Neocatecumenal se inserta en esta misión eclesial como uno de los tantos caminos suscitados por el Espíritu Santo con el Concilio Vaticano II para la nueva evangelización".
"¡Cuántas frescas energías apostólicas habéis suscitado entre los sacerdotes y los laicos -exclamó el Papa-; (…) a cuántas familias habéis ayudado, a través del anuncio del kerygma y del itinerario de descubrimiento del bautismo a encontrar la alegría de la fe y el entusiasmo del anuncio evangélico! La reciente aprobación de los Estatutos del Camino por parte del Pontificio Consejo para los Laicos ha sellado la estima y la benevolencia con que la Santa Sede sigue la obra que el Señor suscitó a través de vuestros iniciadores".
"Vuestra acción apostólica, tan benemérita, será todavía más eficaz a medida que os esforcéis en cultivar constantemente la aspiración a la unidad que Jesús comunicó a los Doce durante la Última Cena. (…) Esa unidad, don del Espíritu Santo y búsqueda incesante de los creyentes, hace de cada comunidad una articulación viva y bien insertada en el Cuerpo místico de Cristo. La unidad de los discípulos del Señor pertenece a la esencia de la Iglesia y es condición indispensable para que su acción evangelizadora sea fecunda y creíble".
"Efectivamente en nuestros días hace falta una vasta acción misionera que implique a todas las diversas realidades eclesiales, las cuales, conservando cada una la originalidad del carisma propio, obran en concordancia para realizar la "pastoral integrada" que ya ha hecho posible conseguir resultados significativos. Vosotros, con plena disponibilidad al servicio del obispo, como recuerdan vuestros estatutos, podréis servir de ejemplo a todas las Iglesias locales que miran a la de Roma como modelo de referencia".
El Papa concluyó invitando a los neocatecumenales a "no desanimarse ante las dificultades, a no buscar éxitos humanos, y a no temer incomprensiones e incluso persecuciones", sino a "confiar únicamente en la potencia de Cristo, a tomar la propia cruz, y a seguir las huellas de nuestro Redentor".
AC/40 ANIVERSARIO/NEOCATECUMENALES VIS 20090112 (530)
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