CIUDAD DEL VATICANO, 10 JUL 2003 (VIS) - El cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado, presidió el pasado 8 de julio en el Vaticano la XXXVII reunión del Consejo de Cardenales para el Estudio de los Problemas Organizativos y Económicos de la Santa Sede, según informa un comunicado publicado ayer tarde.
Participaron también en la reunión los cardenales Roger Michael Mahony, Camillo Ruini, Jean Claude Turcotte, Ricardo María Carles Gordó, Ivan Dias, Edward Michael Egan, Su Beatitud Michel Sabbah y el cardenal Edmund Casimir Szoka, presidente de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano. Asistieron además diversos oficiales de la Prefectura para los Asuntos Económicos de la Santa Sede y del APSA, la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica.
El cardenal Sergio Sebastiani, presidente de la Prefectura, presentó el balance definitivo consolidado de 2002 y observó que el déficit de la Santa Sede fue de 13.506.722 euros. Los ingresos totales fueron 216.575.034 euros y los gastos totales 230.081.756 euros.
"Una parte considerable de las salidas se debe a los costes de gestión ordinaria y extraordinaria de la Curia Romana, que desarrolla su actividad diariamente al servicio del Santo Padre. En la Curia Romana trabajan 2.659 personas, de las cuales 744 eclesiásticos, 351 religiosos y 1.564 laicos; los jubilados son 892. Durante 2002 se han llevado a cabo gastos para la construcción y la compra de nuevas sedes para las Representaciones Pontificias. La Santa Sede, además, ha adquirido en Roma un complejo inmobiliario para las exigencias de espacios adecuados con fines institucionales".
En la reunión se presentó también el balance definitivo consolidado del Estado de la Ciudad del Vaticano cuyo déficit es 16.048.508 euros. El comunicado observa que "este resultado negativo, comparado con el positivo de 2001, es el resultado de la disminución de los ingresos en varios sectores de las actividades propias y de la contribución para cubrir el déficit de Radio Vaticano. Los trabajadores de la Ciudad del Vaticano son 1.511, de los cuales 4 altos dirigentes, 75 religiosos y 1.432 laicos; los jubilados son 566".
El último capítulo analizado fue el relativo al Obolo de San Pedro, que en 2002 fue de 46.648.067 euros. Esta suma es empleada por el Papa para sus obras de caridad, con particular atención por las comunidades eclesiales del Tercer Mundo y "para mitigar las necesidades producidas en el curso del año por las guerras o las catástrofes naturales". Las ofertas de los fieles para el Obolo de San Pedro en 2002 aumentaron un 1,80% respecto a las del año anterior.
CCARD;BALANCE 2002;...;...;VIS;20030710;410;