CIUDAD DEL VATICANO, 30 MAR 2002 (VIS) - A las 20,00 de hoy, el Papa presidió en la basílica de San Pedro la solemne Vigilia de la Noche Santa de Pascua, durante la cual administró el Bautismo y la Confirmación a nueve catecúmenos, siete adultos y dos niños procedentes de Albania, Italia, Japón, Polonia, República Democrática del Congo y China.
La Vigilia comenzó en el atrio de la basílica. Allí el Santo Padre bendijo el fuego nuevo y encendió el cirio pascual. Tras la procesión con el cirio y el canto del Exultet -que Juan Pablo II siguió sobre una peana móvil- el Pontífice presidió desde un altar más bajo colocado delante del altar mayor de la basílica la Liturgia de la Palabra, la Liturgia Bautismal y la Liturgia Eucarística. A derecha e izquierda del Papa se encontraban los cardenales Angelo Sodano, secretario de Estado y Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe.
En la homilía, el Papa habló de "la primera noche, la noche de la creación", en la que "hunde sus raíces el misterio pascual que, tras el drama del pecado, representa la restauración y la culminación de aquel comienzo primero. (...) Hay otra noche -dijo- como acontecimiento fundamental de la historia de Israel: la salida prodigiosa de Egipto (...); la noche del Exodo. (...) Como el nuevo Moisés, Cristo nos ha hecho pasar en su Pascua de la esclavitud del pecado a la libertad de los hijos de Dios. Muertos con Jesús, resucitamos con El a un vida nueva, por la fuerza del Espíritu Santo. Su Bautismo se ha convertido en el nuestro".
El Santo Padre se dirigió a continuación a los catecúmenos, dos de ellos una madre japonesa y otra china, con sus hijos: "'En esta noche de gracia', en la que Cristo ha resucitado de entre los muertos, se realiza en vosotros un 'éxodo' espiritual: dejáis atrás la vieja existencia y entráis en la 'tierra de los vivos'. Esta es la tercera noche, la noche de la resurrección".
"Después de la noche tr gica del Viernes Santo (...), después del gran silencio del Sábado Santo, (...) ha llegado finalmente la noche que precede al 'tercer día', en el que, según las Escrituras, el Señor -concluyó- habría de resucitar, como El mismo había anunciado varias veces a sus discípulos".
JPII-SEMANA SANTA;SABADO SANTO;...;...;VIS;20020403;430;
La Vigilia comenzó en el atrio de la basílica. Allí el Santo Padre bendijo el fuego nuevo y encendió el cirio pascual. Tras la procesión con el cirio y el canto del Exultet -que Juan Pablo II siguió sobre una peana móvil- el Pontífice presidió desde un altar más bajo colocado delante del altar mayor de la basílica la Liturgia de la Palabra, la Liturgia Bautismal y la Liturgia Eucarística. A derecha e izquierda del Papa se encontraban los cardenales Angelo Sodano, secretario de Estado y Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe.
En la homilía, el Papa habló de "la primera noche, la noche de la creación", en la que "hunde sus raíces el misterio pascual que, tras el drama del pecado, representa la restauración y la culminación de aquel comienzo primero. (...) Hay otra noche -dijo- como acontecimiento fundamental de la historia de Israel: la salida prodigiosa de Egipto (...); la noche del Exodo. (...) Como el nuevo Moisés, Cristo nos ha hecho pasar en su Pascua de la esclavitud del pecado a la libertad de los hijos de Dios. Muertos con Jesús, resucitamos con El a un vida nueva, por la fuerza del Espíritu Santo. Su Bautismo se ha convertido en el nuestro".
El Santo Padre se dirigió a continuación a los catecúmenos, dos de ellos una madre japonesa y otra china, con sus hijos: "'En esta noche de gracia', en la que Cristo ha resucitado de entre los muertos, se realiza en vosotros un 'éxodo' espiritual: dejáis atrás la vieja existencia y entráis en la 'tierra de los vivos'. Esta es la tercera noche, la noche de la resurrección".
"Después de la noche tr gica del Viernes Santo (...), después del gran silencio del Sábado Santo, (...) ha llegado finalmente la noche que precede al 'tercer día', en el que, según las Escrituras, el Señor -concluyó- habría de resucitar, como El mismo había anunciado varias veces a sus discípulos".
JPII-SEMANA SANTA;SABADO SANTO;...;...;VIS;20020403;430;
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