CIUDAD DEL VATICANO, 19 JUN 2004 (VIS).-Juan Pablo II recibió hoy a un grupo de peregrinos de la diócesis italiana de Aversa, acompañados por el arzobispo Mario Milano y por el cardenal Crescenzio Sepe, prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, que nació en una localidad de esa diócesis.
El Papa recordó su encuentro con los fieles de Aversa en Roma, durante el Jubileo del 2000 cuando les habló de "la importancia de la solidaridad material y espiritual". "Hoy -prosiguió- os dirijo la misma invitación: 'Sed testigos de solidaridad'. Solidaridad que parte de los aspectos más inmediatos de la vida diaria, del trabajo a la asistencia, para dar vida a una sociedad más justa y equitativa".
"Pero, junto al ámbito social, la solidaridad y la ayuda recíproca -dijo Juan Pablo II- deben dirigirse también al ámbito de la comunión espiritual y de la misión evangelizadora de toda comunidad cristiana. ¿No es quizás la santidad el testimonio más alto de solidaridad que vuestra diócesis está llamada a ofrecer a los hombres y mujeres de nuestro tiempo? ¡Sí! Queridos hermanos y hermanas, proclamad con coherencia a Cristo y su Evangelio con fidelidad generosa y abandono confiado en la voluntad divina. Alimentad vuestra existencia con la oración ferviente, dócil escucha de la palabra de Dios y recurso frecuente a los sacramentos, sobre todo a la Confesión y la Eucaristía".
"Proseguid el camino emprendido -concluyó el Santo Padre- ayudados por la gracia de esta peregrinación. ¡Que Dios haga fecundos vuestros propósitos de comunión eclesial y el compromiso de la nueva evangelización!".
AC/PEREGRINACION AVERSA/MILANO:SEPE VIS 20040621 (280)
El Papa recordó su encuentro con los fieles de Aversa en Roma, durante el Jubileo del 2000 cuando les habló de "la importancia de la solidaridad material y espiritual". "Hoy -prosiguió- os dirijo la misma invitación: 'Sed testigos de solidaridad'. Solidaridad que parte de los aspectos más inmediatos de la vida diaria, del trabajo a la asistencia, para dar vida a una sociedad más justa y equitativa".
"Pero, junto al ámbito social, la solidaridad y la ayuda recíproca -dijo Juan Pablo II- deben dirigirse también al ámbito de la comunión espiritual y de la misión evangelizadora de toda comunidad cristiana. ¿No es quizás la santidad el testimonio más alto de solidaridad que vuestra diócesis está llamada a ofrecer a los hombres y mujeres de nuestro tiempo? ¡Sí! Queridos hermanos y hermanas, proclamad con coherencia a Cristo y su Evangelio con fidelidad generosa y abandono confiado en la voluntad divina. Alimentad vuestra existencia con la oración ferviente, dócil escucha de la palabra de Dios y recurso frecuente a los sacramentos, sobre todo a la Confesión y la Eucaristía".
"Proseguid el camino emprendido -concluyó el Santo Padre- ayudados por la gracia de esta peregrinación. ¡Que Dios haga fecundos vuestros propósitos de comunión eclesial y el compromiso de la nueva evangelización!".
AC/PEREGRINACION AVERSA/MILANO:SEPE VIS 20040621 (280)
No hay comentarios:
Publicar un comentario