Inicio - VIS Vaticano - Recibir VIS - Contáctenos - Calendario VIS

El 'Vatican Information Service' (VIS) es un boletín informativo de la Oficina de Prensa Santa Sede. Transmite diariamente información sobre la actividad magisterial y pastoral del Santo Padre y de la Curia Romana... []

últimas 5 noticias

VISnews en Twitter Ver en YouTube

lunes, 25 de noviembre de 2013

CATECÚMENOS: MANTENED EL ENTUSIASMO DEL MOMENTO EN QUE ABRISTÉIS LOS OJOS A LA FE

Ciudad del Vaticano, 23 de noviembre 2013 (VIS).-La basílica vaticana ha sido escenario esta tarde del rito de admisión al catecumenado, convocado en el contexto del Año de la Fe y presidido por el Papa Francisco. En el rito han participado alrededor de 500 catecúmenos, procedentes de 47 países y de cinco continentes, acompañados por sus catequistas. A partir de las 16,00, poco antes de la llegada del Santo Padre, algunos adultos que se están preparando a recibir el sacramento de la iniciación cristiana han hablado a los presentes de su experiencia y también ha intervenido una pareja de catequistas. La liturgia se ha abierto a las 16,30 con los ritos de introducción que han tenido lugar a la entrada de la basílica. Allí el Papa ha acogido a una representación de los candidatos con sus padrinos invitándoles a entrar en la Iglesia.

Durante la liturgia de la Palabra, antes de la entrega del libro de los Evangelios a diversos catecúmenos, el Papa se ha dirigido en la homilía a los presentes, recordando que venían
de muchos países diferentes, de tradiciones culturales y experiencias diferentes”. “Y sin embargo -ha observado- esta tarde sentimos que tenemos entre nosotros tantas cosas en común. Sobre todo una: el deseo de Dios. ¡Que importante es mantenerlo vivo!. Si falta la sed del Dios viviente, la fe corre el riesgo de hacerse rutinaria, de apagarse, como un fuego que no se atiza. Corre el riesgo de volverse rancia, sin sentido”.

Francisco ha citado el pasaje evangélico en que Juan Bautista indica a sus discípulos a Jesús, como el Cordero de Dios. Dos de ellos siguen al Maestro, y luego, a su vez, se convierten en “mediadores” para que, a su vez, los otros encuentren al Señor. En ese texto, hay tres momentos que llaman a la experiencia del catecumenado.

En primer lugar -ha observado- la escucha. Los dos discípulos escucharon el testimonio del Bautista. También vosotros, queridos catecúmenos, habéis escuchado a los que os han hablado de Jesús y os han propuesto seguirlo...En el tumulto de tantas voces que resuenan alrededor de nosotros y dentro de nosotros, habéis escuchado y acogido la voz que os indicaba a Jesús como el único que puede dar pleno sentido a nuestra vida.”

El segundo momento es el encuentro. Los discípulos encuentran al Maestro y permanecen con Él. Después de haberlo encontrado, advierten inmediatamente algo nuevo en su corazón: la exigencia de transmitir su alegría también a los otros, para que también ellos puedan encontrarlo... Esta escena...nos recuerda que Dios no nos ha creado para estar solos, encerrados en nosotros mismos, sino para poder encontrarle y para abrirnos al encuentro con los otros. Dios, en primer lugar, viene hacia cada uno de nosotros. ¡Y esto es maravilloso! En la Biblia, Dios aparece siempre como el que toma la iniciativa del encuentro con el hombre: es Él quien busca al hombre, y por lo general, lo hace mientras éste pasa por la experiencia, amarga y trágica, de traicionar a Dios y huir de Él. Dios no espera a buscarlo: ¡lo busca enseguida! No se cansa de esperarnos...Y cuando se produce el encuentro, no es nunca apresurado, porque Dios desea permanecer mucho tiempo con nosotros para sostenernos, para consolarnos. Dios se apresura para encontrarnos, pero nunca se apresura para dejarnos. Como nosotros lo anhelamos a Él... así también Él quiere estar con nosotros, porque...somos... sus criaturas”.

La última parte del pasaje es caminar. “Los dos discípulos -ha explicado - caminan hacia Jesús y luego hacen un trecho de camino junto a Él. La fe es un camino con Jesús… y es un camino que dura toda la vida. Al final tendrá lugar el encuentro definitivo. Efectivamente, en algunos momentos de este camino nos sentimos cansados y confundidos. Pero la fe nos da la certeza de la presencia constante de Jesús en cada situación, también la más dolorosa o difícil de entender”.

Queridos catecúmenos -ha concluido el pontífice- hoy empezáis el camino del catecumenado. Os deseo que lo recorráis con alegría, seguros del apoyo de toda la Iglesia, que os mira con mucha confianza. María, la discípula perfecta, os acompaña: ¡ Os invito a mantener el entusiasmo del primer momento que os hizo abrir los ojos a la luz de la fe!”

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Copyright © VIS - Vatican Information Service