CIUDAD DEL VATICANO, 18 OCT 2007 (VIS).-Hoy se hizo público el discurso pronunciado por el arzobispo de Dublín y primado de Irlanda, monseñor Diarmuid Martin, ayer 17 de octubre, en la sede de las Naciones Unidas, en Nueva York, con ocasión del XL aniversario de la Encíclica "Populorum progressio" de Pablo VI.
El arzobispo Martin recordó que "el motivo que impulsó al Papa a escribir esta encíclica fue el desafío de afrontar las necesidades de las naciones más pobres y sus pueblos".
Tras poner de relieve que la "Populorum progressio" fue la primera encíclica social escrita después del Concilio Vaticano II, afirmó que "tenía entre sus objetivos establecer un nuevo modo de considerar las relaciones entre la Iglesia y el mundo".
"El concepto de desarrollo auténtico -continuó- es uno de los conceptos clave de la encíclica" y "atañe a la naturaleza de la persona humana y a la respuesta que tenemos que dar a sus necesidades".
El arzobispo Martin subrayó que "si el Papa Pablo VI estuviese aquí hoy con nosotros (el 4 de octubre de 1965 visitó la sede de la ONU y pronunció un discurso), seguramente daría las gracias a todos los que han prestado un servicio a la humanidad a través de esta institución. Seguro que haría algún un comentario sobre el lento progreso de la reforma de la ONU. Es necesaria una Organización de las Naciones Unidas que funcione. Las actuales posibilidades de interrelación entre los pueblos ofrecen modos de cooperación nuevos e innovadores, también en el ámbito de la ONU".
Refiriéndose a la responsabilidad del desarrollo y de la cooperación internacional, "la encíclica subraya consistentemente el papel de las autoridades públicas. Recuerda el debate actual acerca del buen gobierno y de la importante tarea de la política".
"La política -terminó- es una dimensión esencial de la construcción de la sociedad. Es necesario un renacimiento de la política en el mundo, una nueva generación de políticos inspirados por ideales, pero que sean capaces de asumir el riesgo de convertir esos ideales en algo "posible", a través del mejor uso de recursos y talentos para promover el bien de todos".
.../POPULORUM PROGRESSIO/ONU:MARTIN VIS 20071018 (350)
El arzobispo Martin recordó que "el motivo que impulsó al Papa a escribir esta encíclica fue el desafío de afrontar las necesidades de las naciones más pobres y sus pueblos".
Tras poner de relieve que la "Populorum progressio" fue la primera encíclica social escrita después del Concilio Vaticano II, afirmó que "tenía entre sus objetivos establecer un nuevo modo de considerar las relaciones entre la Iglesia y el mundo".
"El concepto de desarrollo auténtico -continuó- es uno de los conceptos clave de la encíclica" y "atañe a la naturaleza de la persona humana y a la respuesta que tenemos que dar a sus necesidades".
El arzobispo Martin subrayó que "si el Papa Pablo VI estuviese aquí hoy con nosotros (el 4 de octubre de 1965 visitó la sede de la ONU y pronunció un discurso), seguramente daría las gracias a todos los que han prestado un servicio a la humanidad a través de esta institución. Seguro que haría algún un comentario sobre el lento progreso de la reforma de la ONU. Es necesaria una Organización de las Naciones Unidas que funcione. Las actuales posibilidades de interrelación entre los pueblos ofrecen modos de cooperación nuevos e innovadores, también en el ámbito de la ONU".
Refiriéndose a la responsabilidad del desarrollo y de la cooperación internacional, "la encíclica subraya consistentemente el papel de las autoridades públicas. Recuerda el debate actual acerca del buen gobierno y de la importante tarea de la política".
"La política -terminó- es una dimensión esencial de la construcción de la sociedad. Es necesario un renacimiento de la política en el mundo, una nueva generación de políticos inspirados por ideales, pero que sean capaces de asumir el riesgo de convertir esos ideales en algo "posible", a través del mejor uso de recursos y talentos para promover el bien de todos".
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