CIUDAD DEL VATICANO, 25 ENE 2004 (VIS).-Juan Pablo II rezó esta mañana el Angelus con los fieles reunidos en la Plaza de San Pedro y, antes de la oración mariana, habló de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos y de la Jornada Mundial de la Lepra. También saludó a los jóvenes de Acción Católica Italiana que, a primeros de año, llegan a la Plaza de San Pedro con su "Caravana de la Paz" que cierra el Mes de la Paz.
"Hoy, festividad de la conversión del apóstol Pablo -dijo el Papa- finaliza la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, durante la cual en todos los lugares de la tierra, los cristianos han rezado juntos para que se realice su plena comunión según la voluntad del Señor, 'Ut unum sint, -Para que sean uno'. La invocación ardiente de Jesús en el Cenáculo sigue recordando a las comunidades cristianas que la unidad es un don que ha de ser acogido y desarrollado de manera cada vez más profunda. La unidad de los cristianos ha sido una inquietud constante de mi pontificado y sigue siendo una prioridad exigente de mi ministerio. (…) El anhelo de Cristo es 'imperativo que nos obliga, fuerza que nos sostiene y saludable reproche por nuestra desidia y estrechez de corazón'".
Después de rezar el Angelus, el Santo Padre recordó que "esta tarde, en la basílica de San Pablo Extramuros, tiene lugar la tradicional celebración ecuménica de clausura de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos. Invito a todos a unirse espiritualmente a un momento de comunión tan importante".
El Papa habló también de la Jornada Mundial de la Lepra, que se celebra hoy, e invitó a los fieles a rezar por los que padecen la enfermedad de Hansen.
A continuación dos jóvenes de Acción Católica de Roma, presentes en el estudio del Papa, en representación de los miles de jóvenes reunidos en la plaza, leyeron un mensaje de agradecimiento a Juan Pablo II por su labor en favor de la paz. Después, junto con el Santo Padre, soltaron dos palomas blancas, una de las cuales no quiso volar y se quedó en el repecho de la ventana. El Papa dio las gracias a los jóvenes por sus palabras y les aseguró que él también les quería mucho.
ANG/UNIDAD CRISTIANOS:PAZ/ACCION CATOLICA VIS 20040126 (400)
"Hoy, festividad de la conversión del apóstol Pablo -dijo el Papa- finaliza la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, durante la cual en todos los lugares de la tierra, los cristianos han rezado juntos para que se realice su plena comunión según la voluntad del Señor, 'Ut unum sint, -Para que sean uno'. La invocación ardiente de Jesús en el Cenáculo sigue recordando a las comunidades cristianas que la unidad es un don que ha de ser acogido y desarrollado de manera cada vez más profunda. La unidad de los cristianos ha sido una inquietud constante de mi pontificado y sigue siendo una prioridad exigente de mi ministerio. (…) El anhelo de Cristo es 'imperativo que nos obliga, fuerza que nos sostiene y saludable reproche por nuestra desidia y estrechez de corazón'".
Después de rezar el Angelus, el Santo Padre recordó que "esta tarde, en la basílica de San Pablo Extramuros, tiene lugar la tradicional celebración ecuménica de clausura de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos. Invito a todos a unirse espiritualmente a un momento de comunión tan importante".
El Papa habló también de la Jornada Mundial de la Lepra, que se celebra hoy, e invitó a los fieles a rezar por los que padecen la enfermedad de Hansen.
A continuación dos jóvenes de Acción Católica de Roma, presentes en el estudio del Papa, en representación de los miles de jóvenes reunidos en la plaza, leyeron un mensaje de agradecimiento a Juan Pablo II por su labor en favor de la paz. Después, junto con el Santo Padre, soltaron dos palomas blancas, una de las cuales no quiso volar y se quedó en el repecho de la ventana. El Papa dio las gracias a los jóvenes por sus palabras y les aseguró que él también les quería mucho.
ANG/UNIDAD CRISTIANOS:PAZ/ACCION CATOLICA VIS 20040126 (400)
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario