CIUDAD DEL VATICANO, 16 NOV 2003 (VIS).-Antes de rezar el Angelus este mediodía con los fieles congregados en la Plaza de San Pedro, el Papa se refirió a los atentados terroristas del miércoles y del sábado en Irak y en Turquía y condenó nuevamente este tipo de acciones:
"Una vez más -dijo-, en estos últimos días, el terrorismo ha realizado una obra nefasta, especialmente devastadora en Irak y Turquía. Mientras sigo rezando por las víctimas, renuevo mi cercanía espiritual a las numerosas familias que lloran a sus muertos. Al mismo tiempo, expreso viva solidaridad a todos los que atienden a los heridos y a los que trabajan por remediar los daños provocados. Nadie puede abandonarse a la tentación del desaliento o de la venganza: el respeto de la vida, la solidaridad internacional, la observancia de la ley, deben prevalecer sobre el odio y la violencia".
El Santo Padre renovó también su "firme condena por todas las acciones terroristas de estos últimos tiempos en Tierra Santa. Además, debo constatar que, por desgracia, en aquellos lugares el dinamismo de la paz parece que se ha parado. La construcción de un muro entre el pueblo israelí y el palestino es visto por muchos como un nuevo obstáculo en el camino hacia una convivencia pacífica. ¡En realidad, Tierra Santa no tiene necesidad de muros sino de puentes! Sin reconciliación de los ánimos, no puede haber paz".
"Confiamos al Dios de la misericordia y de la paz, por intercesión de Santa María, a los pueblos de aquella parte del mundo. Que los responsables -concluyó- tengan la valentía de reanudar el diálogo y las negociaciones, liberando así el camino hacia un Oriente Medio reconciliado en la justicia y en la paz"
ANG/ATENTADOS IRAK:TURQUIA/… VIS20031117 (300)
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