CIUDAD DEL VATICANO, 24 MAR 2002 (VIS) - Tras la misa del Domingo de Ramos, Juan Pablo II rezó el Angelus con unas 30.000 personas reunidas en una soleada Plaza de San Pedro durante una imprevista fría jornada de primavera. Al final de la oración mariana, el Papa, todavía vestido con la casulla, sorprendió a los fieles subiendo al jeep papal para recorrer la plaza saludando a las personas allí congregadas.
Antes de rezar el Angelus, el Santo Padre dijo: "Nos dirigimos a María Santísima que, al lado de la cruz de su Hijo, confirmó el 'fiat' pronunciado durante el anuncio del Angel. ¡Que Ella nos ayude a seguir fielmente a Jesús, con el ejemplo de tantos hermanos y hermanas que han dado del Evangelio el testimonio supremo de la sangre! Pienso en particular en los misioneros y misioneras mártires, a quienes hoy Italia conmemora como todos los años. ¡Que la Virgen obtenga esta coherencia y este valor de forma especial para vosotros jóvenes, llamados a tomar decisiones fundamentales para vuestra vida!".
A continuación, Juan Pablo II saludó a los peregrinos en francés, inglés, alemán, español, portugués, polaco e italiano.
ANG;...;...;...;VIS;20020325;240;
Antes de rezar el Angelus, el Santo Padre dijo: "Nos dirigimos a María Santísima que, al lado de la cruz de su Hijo, confirmó el 'fiat' pronunciado durante el anuncio del Angel. ¡Que Ella nos ayude a seguir fielmente a Jesús, con el ejemplo de tantos hermanos y hermanas que han dado del Evangelio el testimonio supremo de la sangre! Pienso en particular en los misioneros y misioneras mártires, a quienes hoy Italia conmemora como todos los años. ¡Que la Virgen obtenga esta coherencia y este valor de forma especial para vosotros jóvenes, llamados a tomar decisiones fundamentales para vuestra vida!".
A continuación, Juan Pablo II saludó a los peregrinos en francés, inglés, alemán, español, portugués, polaco e italiano.
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