CIUDAD DEL VATICANO, 29 JUN 2009 (VIS).-El Papa se asomó este mediodía a la ventana de su estudio privado que da a la Plaza de San Pedro para rezar el Angelus con miles de peregrinos allí congregados.
En la solemnidad de San Pedro y San Pablo, Benedicto XVI felicitó especialmente a los fieles de la comunidad de Roma, su diócesis, y aseguró que rezaba "constantemente para que esta ciudad mantenga viva su vocación cristiana, no solo conservando inalterado su inmenso patrimonio espiritual y cultural, sino también para que sus habitantes traduzcan la belleza de la fe recibida en modos concretos de pensar y de actuar, y ofrezcan así a cuantos, por diferentes razones vienen a esta ciudad, una atmósfera llena de humanidad y de valores evangélicos".
"La solemnidad de hoy -continuó- reviste también un carácter universal: expresa la unidad y la catolicidad de la Iglesia. Por eso, cada año en esta fecha, vienen a Roma los nuevos arzobispos metropolitanos para recibir el palio, símbolo de comunión con el Sucesor de Pedro".
El Santo Padre pidió que la veneración común de "estos mártires -Pedro y Pablo- sea prenda de comunión cada vez más plena y sentida entre los cristianos de todo el mundo".
Después del Angelus, Benedicto XVI señaló que "es inminente la publicación de mi tercera encíclica, que lleva por título 'Caritas in veritate'. Retomando las temáticas sociales contenidas en la (encíclica) "Populorum progressio", escrita por el Siervo de Dios Pablo VI en 1967, este documento -que lleva la fecha de hoy, 29 de junio, solemnidad de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo- trata de profundizar en algunos aspectos del desarrollo integral en nuestra época, a la luz de la caridad en la verdad".
"Confío a vuestras oraciones -terminó- esta ulterior contribución que la Iglesia ofrece a la humanidad en su compromiso por un progreso sostenible, que respete plenamente la dignidad humana y las exigencias reales de todos".
No hay comentarios:
Publicar un comentario