LA IGLESIA NO BUSCA PRIVILEGIOS SINO DESARROLLAR SU MISION

CIUDAD DEL VATICANO, 18 NOV 2005 (VIS).-El Papa recibió esta mañana a los prelados de la Conferencia Episcopal de la República Checa que acaban de realizar su visita "ad limina".

Al comienzo de su discurso, el Santo Padre afirmó que en los encuentros con cada uno de los prelados había constatado que la Iglesia en este país "es muy viva y que se siente llamada e ser levadura en una sociedad secularizada, pero al mismo tiempo, interesada (...) en el mensaje liberador pero exigente del Evangelio".

Benedicto XVI dijo que "las devastaciones materiales y espirituales del régimen precedente han dejado en los conciudadanos, ahora que han recobrado la plena libertad, el ansia de recuperar el tempo perdido, continuando hacia adelante, pero sin prestar quizá una suficiente atención a la importancia de los valores espirituales que dan consistencia a las conquistas civiles y materiales".

Vuestras comunidades, continuó, "ya ofrecen un testimonio sólido que atrae a muchas personas del mundo de la cultura. Se trata de un signo di esperanza para la formación de un laicado maduro, que sepa hacerse cargo de las propias responsabilidades eclesiales".

Tras dar gracias a Dios porque los sacerdotes y religiosos son "personas activas y laboriosas, disciplinadas y unidas", el Papa dijo que aun siendo un "motivo di consuelo, sin embargo, no debe hacer olvidar otros aspectos que suscitan una preocupación comprensible. En primer lugar, la escasez de sacerdotes", que "induce justamente a dedicar una especial atención a la pastoral vocacional. También desde este punto de vista, el compromiso por la formación de sólidas familias cristianas es particularmente importante para la vida de la Iglesia".

Por lo que concierne al compromiso pastoral de la parroquia, el Santo Padre subrayó la importancia de que los laicos participen en las actividades parroquiales y que se empapen de "una sana y rica vida litúrgica". "La comunidad cristiana -continuó- es una realidad de personas con las propias reglas, un cuerpo vivo que, en Jesús, se halla en el mundo para dar testimonio de la fuerza del Evangelio. Se trata, por tanto, de un conjunto de hermanos y hermanas que no tienen objetivos di poder o de interés egoísta, pero viven con alegría la caridad de Dios, que es Amor".

"En este contexto -añadió-, el Estado no debería tener problemas para reconocer en la Iglesia un interlocutor que no supone ningún perjuicio a sus funciones al servicio de los ciudadanos. La Iglesia desarrolla su acción en el ámbito religioso, para consentir a los creyentes que expresen su fe, sin invadir la esfera de competencia de la autoridad civil. (...) Como es sabido, la Iglesia no busca privilegios, sino solo poder llevar a cabo su misión. Cuando se le reconoce este derecho, en realidad se beneficia toda la sociedad".

Benedicto XVI concluyó exhortando a los prelados checos a "proseguir con confianza en el diálogo ecuménico. Sé que es intenso, como lo es también el dialogo en el campo cultural con todos los ciudadanos sobre los valores fundamentales sobre los que se rige la convivencia civil".
AL/.../REPUBLICA CHECA VIS 20051118 (500)