CIUDAD DEL VATICANO, 16 ENE 2005 (VIS).-La Jornada Mundial de los Emigrantes y Refugiados y la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos fueron los temas centrales de reflexión del Papa antes de rezar el Angelus con los peregrinos reunidos en la Plaza de San Pedro.
Juan Pablo II recordó que la Iglesia entera celebra hoy la Jornada Mundial de los Emigrantes y Refugiados y que en el mensaje que escribió para este día subrayó "la importancia de la integración entre los pueblos, que requiere un justo equilibrio entre la afirmación de la identidad propia y el reconocimiento de la de los demás. Saludo cordialmente a todos los emigrantes y espero que a través del diálogo aumenten la simpatía y la comprensión entre las diversas culturas".
Después explicó que la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, cuyo tema este año es "Cristo, único fundamento de la Iglesia", comenzaba el 18 de enero y que estuvo precedida por la Jornada para el Diálogo entre Judíos y Cristianos.
"Invito a todas las comunidades -concluyó- a llevar a cabo gestos significativos de encuentro y de diálogo ecuménico y a implorar a Dios el don de la unidad plena de todos los discípulos de Cristo. Confiemos a María Santísima estos eventos eclesiales tan importantes. ¡Que su intercesión maternal ayude a todos los cristianos a formar un sólo corazón y una sola alma y a todos los hombres a crecer en solidaridad para construir un mundo de paz!".
ANG/REFUGIADOS:UNIDAD CRISTIANOS/... VIS 20050117 (260)
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