TELEGRAMA POR LA MUERTE DEL CARDENAL HICKEY

CIUDAD DEL VATICANO, 25 OCT 2004 (VIS).-Sigue el telegrama enviado por Juan Pablo II al cardenal Theodore McCarrick, arzobispo de Washington (EE.UU), tras la noticia del fallecimiento de su predecesor, el cardenal James Aloysius  Hickey, ayer, a los 84 años:

   "Profundamente apenado por la muerte del cardenal James Aloysius  Hickey,  le doy mi más sentido pésame tanto a Usted como a todo el clero, religiosos y laicos de la archidiócesis de Washington. Recordando con gratitud el incansable compromiso del cardenal Hickey en la difusión del Evangelio, la enseñanza de la Fe y la formación de los futuros sacerdotes,  me uno a vosotros para pedir que Dios, nuestro Padre misericordioso, le asegure la recompensa de sus esfuerzos y acoja su noble alma en la alegría y la paz de su reino eterno. A todos los reunidos para la solemne misa fúnebre, imparto de buen grado mi bendición apostólica en prenda de consuelo y de fuerza en el Señor".
TGR/FALLECIMIENTO HICKEY/MCCARRICK               VIS 20041025 (170)