CIUDAD DEL VATICANO, 17 FEB 2002 (VIS) - Después de regresar de la parroquia romana de San Enrico, el Papa se asomó al mediodía a la ventana de su estudio en el palacio apostólico vaticano para rezar el Angelus con los fieles congregados en la Plaza de San Pedro.
Juan Pablo II afirmó que "hoy, primer domingo de Cuaresma, la liturgia nos vuelve a proponer la impresionante página evangélica de las tentaciones de Jesús. (...) La misión del Redentor inicia precisamente con su victoria sobre la triple insidia del príncipe del mal".
"'¡Ap rtate Satanás!'. La actitud decidida del Mesías -continuó- constituye para nosotros un ejemplo y una invitación para seguirlo con valiente determinación. El demonio, 'príncipe de este mundo', sigue también hoy con su engañosa acción. Todo ser humano, además de por la propia concupiscencia y del mal ejemplo de los demás, es tentado también por el demonio y lo es aún más cuando menos se da cuenta. ¡Cuántas veces cede con ligereza a las falaces ilusiones de la carne y del maligno, y experimenta desilusiones amargas! Es necesario permanecer vigilantes para reaccionar con prontitud a todos los ataques de la tentación".
El Santo Padre señaló que "la Iglesia, experta maestra en humanidad y santidad nos indica instrumentos antiguos y siempre nuevos para el combate cotidiano contra las sugestiones del mal: la oración, los sacramentos, la penitencia, la escucha atenta de la Palabra de Dios, la vigilancia y el ayuno".
Antes de terminar, el Papa confió a la Virgen de modo especial los ejercicios espirituales que esta tarde inicia en el Vaticano junto con sus colaboradores de la Curia Romana. Y pidió a los fieles que les acompañasen con la oración "para que sean días fructíferos no solo para los que los hacen, sino para toda la Iglesia".
ANG;TENTACIONES;...;...;VIS;20020218;300;
Juan Pablo II afirmó que "hoy, primer domingo de Cuaresma, la liturgia nos vuelve a proponer la impresionante página evangélica de las tentaciones de Jesús. (...) La misión del Redentor inicia precisamente con su victoria sobre la triple insidia del príncipe del mal".
"'¡Ap rtate Satanás!'. La actitud decidida del Mesías -continuó- constituye para nosotros un ejemplo y una invitación para seguirlo con valiente determinación. El demonio, 'príncipe de este mundo', sigue también hoy con su engañosa acción. Todo ser humano, además de por la propia concupiscencia y del mal ejemplo de los demás, es tentado también por el demonio y lo es aún más cuando menos se da cuenta. ¡Cuántas veces cede con ligereza a las falaces ilusiones de la carne y del maligno, y experimenta desilusiones amargas! Es necesario permanecer vigilantes para reaccionar con prontitud a todos los ataques de la tentación".
El Santo Padre señaló que "la Iglesia, experta maestra en humanidad y santidad nos indica instrumentos antiguos y siempre nuevos para el combate cotidiano contra las sugestiones del mal: la oración, los sacramentos, la penitencia, la escucha atenta de la Palabra de Dios, la vigilancia y el ayuno".
Antes de terminar, el Papa confió a la Virgen de modo especial los ejercicios espirituales que esta tarde inicia en el Vaticano junto con sus colaboradores de la Curia Romana. Y pidió a los fieles que les acompañasen con la oración "para que sean días fructíferos no solo para los que los hacen, sino para toda la Iglesia".
ANG;TENTACIONES;...;...;VIS;20020218;300;
No hay comentarios:
Publicar un comentario