CIUDAD DEL VATICANO, 3 FEB 2008 (VIS).-En el Angelus de este cuarto domingo del tiempo ordinario, Benedicto XVI confió a los fieles presentes en la Plaza de San Pedro y a todos los que le escuchaban varias intenciones.
Tras recordar que ayer se celebró la Jornada de la Vida Consagrada, el Papa invitó a rezar por todos los que "Cristo llama para que le sigan más de cerca con una consagración especial" y pidió que la Virgen "conceda muchas y santas vocaciones a la vida consagrada, que constituye una riqueza inestimable para la Iglesia y para el mundo".
El Santo Padre afirmó que otra intención de oración "nos la ofrece la Jornada por la vida que hoy se celebra en Italia bajo el tema "Servir a la vida". En este sentido exhortó a que "cada uno, según las propias posibilidades, profesionalidad y competencias, se sienta siempre empujado a amar y servir la vida, desde su inicio a su ocaso natural". Benedicto XVI subrayó que "de hecho, es compromiso de todos acoger la vida humana como don que hay que respetar, tutelar y promover, todavía más cuando es frágil y necesita atención y cuidados, tanto antes del nacimiento como en su fase terminal".
El Papa alentó a los que se "dedican con fatiga pero con alegría, sin clamores y con gran empeño a atender a los familiares ancianos y discapacitados y a quienes consagran regularmente parte del propio tiempo a ayudar a aquellas personas de todas las edades cuya vida está marcada por tantas y tan distintas formas de pobreza".
Refiriéndose posteriormente a la Cuaresma, que inicia el miércoles que viene, Benedicto XVI pidió que sea "un tiempo de auténtica conversión para todos los cristianos, llamados a un testimonio de la propia fe cada vez más claro y valiente".
El Santo Padre concluyó su alocución recordando que desde ayer y hasta el 11 de febrero incluido, memoria de Nuestra Señora de Lourdes y 150 aniversario de las apariciones, "es posible recibir la indulgencia plenaria, aplicable a los difuntos, con las condiciones de siempre -Confesión, Comunión y oración según las intenciones del Papa-, y rezando ante una imagen de la Virgen de Lourdes expuesta a la veneración pública. Para los ancianos y los enfermos, esto será posible si lo desean de corazón".
ANG/DEFENSA VIDA/... VIS 20080204 (400)
Tras recordar que ayer se celebró la Jornada de la Vida Consagrada, el Papa invitó a rezar por todos los que "Cristo llama para que le sigan más de cerca con una consagración especial" y pidió que la Virgen "conceda muchas y santas vocaciones a la vida consagrada, que constituye una riqueza inestimable para la Iglesia y para el mundo".
El Santo Padre afirmó que otra intención de oración "nos la ofrece la Jornada por la vida que hoy se celebra en Italia bajo el tema "Servir a la vida". En este sentido exhortó a que "cada uno, según las propias posibilidades, profesionalidad y competencias, se sienta siempre empujado a amar y servir la vida, desde su inicio a su ocaso natural". Benedicto XVI subrayó que "de hecho, es compromiso de todos acoger la vida humana como don que hay que respetar, tutelar y promover, todavía más cuando es frágil y necesita atención y cuidados, tanto antes del nacimiento como en su fase terminal".
El Papa alentó a los que se "dedican con fatiga pero con alegría, sin clamores y con gran empeño a atender a los familiares ancianos y discapacitados y a quienes consagran regularmente parte del propio tiempo a ayudar a aquellas personas de todas las edades cuya vida está marcada por tantas y tan distintas formas de pobreza".
Refiriéndose posteriormente a la Cuaresma, que inicia el miércoles que viene, Benedicto XVI pidió que sea "un tiempo de auténtica conversión para todos los cristianos, llamados a un testimonio de la propia fe cada vez más claro y valiente".
El Santo Padre concluyó su alocución recordando que desde ayer y hasta el 11 de febrero incluido, memoria de Nuestra Señora de Lourdes y 150 aniversario de las apariciones, "es posible recibir la indulgencia plenaria, aplicable a los difuntos, con las condiciones de siempre -Confesión, Comunión y oración según las intenciones del Papa-, y rezando ante una imagen de la Virgen de Lourdes expuesta a la veneración pública. Para los ancianos y los enfermos, esto será posible si lo desean de corazón".
ANG/DEFENSA VIDA/... VIS 20080204 (400)
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