CIUDAD DEL VATICANO, 9 MAR 2007 (VIS).-El arzobispo Celestino Migliore, observador permanente de la Santa Sede ante la ONU, pronunció ayer en Nueva York un discurso ante la 61 Sesión de la Asamblea General, sobre el tema "Informal Thematic Debate on the promotion of gender equality and the empowerment of women".
El arzobispo Migliore afirmó que "la búsqueda legítima de la igualdad entre hombres y mujeres ha alcanzado resultados positivos en el campo de la igualdad de los derechos. Esta búsqueda supone ser conscientes de que la igualdad acompaña y no pone en peligro, y mucho menos contradice, la diferencia y complementariedad entre hombres y mujeres. Sin este reconocimiento, la lucha por la igualdad no sería auténtica".
"Cuando se minimizan las diferencias psíquicas y se maximiza la dimensión puramente cultural, esta falta de nitidez en las diferencias tiene un impacto sobre la estabilidad de la sociedad y de la familia y no menos sobre la calidad de las relaciones entre hombres y mujeres. La igualdad entre hombres y mujeres y la potenciación de las mujeres se logrará cuando las diferencias entre los sexos sean reconocidas y resaltadas como complementarias y cuando el elemento cultural del género se comprenda en su propio contexto".
Potenciación de la mujer, añadió el prelado, también significa "afrontar las prácticas discriminatorias que excluyen a las mujeres de la toma de decisiones, con frecuencia causadas o agravadas por discriminaciones basadas en la raza, etnia, religión o posición social de la mujer".
El arzobispo Migliore puso de relieve que el sistema de microcrédito ayuda al enriquecimiento de las mujeres. En este contexto, recordó que la agencia "Catholic Relief Services" opera en 99 países de todos los continentes. "Actualmente los programas en general son operativos en al menos 30 países, con más de 850.000 clientes, de los cuales casi el 75% son mujeres".
"Los estudios han demostrado que el microcrédito ha contribuido ampliamente a la mejora de la posición de las mujeres, que han conseguido un mayor respeto por parte de los hombres, siendo consideradas contribuyentes importantes de la sociedad".
El nuncio apostólico concluyó subrayando que "la educación para las mujeres sigue siendo la herramienta fundamental en la promoción de la igualdad entre hombres y mujeres y en la potenciación de las mujeres para contribuir plenamente a la sociedad".
DELSS/MUJERES/ONU:MIGLIORE VIS 20070309 (400)
El arzobispo Migliore afirmó que "la búsqueda legítima de la igualdad entre hombres y mujeres ha alcanzado resultados positivos en el campo de la igualdad de los derechos. Esta búsqueda supone ser conscientes de que la igualdad acompaña y no pone en peligro, y mucho menos contradice, la diferencia y complementariedad entre hombres y mujeres. Sin este reconocimiento, la lucha por la igualdad no sería auténtica".
"Cuando se minimizan las diferencias psíquicas y se maximiza la dimensión puramente cultural, esta falta de nitidez en las diferencias tiene un impacto sobre la estabilidad de la sociedad y de la familia y no menos sobre la calidad de las relaciones entre hombres y mujeres. La igualdad entre hombres y mujeres y la potenciación de las mujeres se logrará cuando las diferencias entre los sexos sean reconocidas y resaltadas como complementarias y cuando el elemento cultural del género se comprenda en su propio contexto".
Potenciación de la mujer, añadió el prelado, también significa "afrontar las prácticas discriminatorias que excluyen a las mujeres de la toma de decisiones, con frecuencia causadas o agravadas por discriminaciones basadas en la raza, etnia, religión o posición social de la mujer".
El arzobispo Migliore puso de relieve que el sistema de microcrédito ayuda al enriquecimiento de las mujeres. En este contexto, recordó que la agencia "Catholic Relief Services" opera en 99 países de todos los continentes. "Actualmente los programas en general son operativos en al menos 30 países, con más de 850.000 clientes, de los cuales casi el 75% son mujeres".
"Los estudios han demostrado que el microcrédito ha contribuido ampliamente a la mejora de la posición de las mujeres, que han conseguido un mayor respeto por parte de los hombres, siendo consideradas contribuyentes importantes de la sociedad".
El nuncio apostólico concluyó subrayando que "la educación para las mujeres sigue siendo la herramienta fundamental en la promoción de la igualdad entre hombres y mujeres y en la potenciación de las mujeres para contribuir plenamente a la sociedad".
DELSS/MUJERES/ONU:MIGLIORE VIS 20070309 (400)
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