CIUDAD DEL VATICANO, 25 JUN 2006 (VIS).-La solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús y la festividad de San Juan Bautista, que de alguna forma "rodean" este domingo, fueron los temas tratados por Benedicto XVI en la meditación que precede al Angelus.
El Papa recordó que la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, celebrada el pasado viernes, une "la devoción popular con la profundidad teológica", que hunde sus raíces "en el misterio de la Encarnación", porque "a través del Corazón de Jesús se manifestó de manera sublime el Amor de Dios hacia la humanidad".
Por eso, el culto "conserva toda su validez y atrae especialmente a las almas sedientas de la misericordia de Dios, que así encuentran la fuente inagotable donde beber el agua de la Vida capaz de regar los desiertos del alma y de hacer que florezca la esperanza".
Esa solemnidad coincide además con la Jornada mundial de oración por la santificación de los sacerdotes. "Aprovecho la oportunidad -dijo el Santo Padre- para invitaros (...) a rezar siempre para que los sacerdotes sean testigos del amor de Cristo".
Después, el Papa habló de la festividad de San Juan Bautista (24 de junio). "Es el único santo de quien se conmemora el nacimiento, ya que marcó el inicio del cumplimiento de las promesas divinas. (...) Su fiesta nos recuerda que Cristo es el referente de toda nuestra vida, que se realiza acogiéndole como Palabra, Luz y Esposo, de quien nosotros somos voces, velas y amigos".
"Dejar que el "yo" de Cristo tome el lugar de nuestro "yo" -concluyó Benedicto XVI- fue la aspiración ejemplar de los apóstoles Pedro y Pablo, que la Iglesia venerará el próximo 29 de junio".
Una vez rezado el Angelus, el Papa mencionó el accidente ocurrido durante las obras de la autopista italiana entre Catania y Siracusa, en el que falleció un trabajador y hubo varios heridos. "Elevo una oración especial de sufragio y estoy cerca espiritualmente de los heridos y sus parientes -dijo el Santo Padre- y auspicio que se conceda siempre mayor atención a las condiciones de seguridad en el trabajo, para que no se repitan acontecimientos tan dramáticos".
Por último, Benedicto XVI recordó que el domingo que precede a la solemnidad de San Pedro y San Pablo se celebra en Italia la Jornada por la Caridad del Papa. "Agradezco de corazón a la comunidad eclesial italiana sus oraciones y su ayuda a mi ministerio de sucesor de Pedro, llamado a servir a todo el pueblo de Dios".
ANG/SAGRADO CORAZON:SAN JUAN/... VIS 20060626 (430)
El Papa recordó que la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, celebrada el pasado viernes, une "la devoción popular con la profundidad teológica", que hunde sus raíces "en el misterio de la Encarnación", porque "a través del Corazón de Jesús se manifestó de manera sublime el Amor de Dios hacia la humanidad".
Por eso, el culto "conserva toda su validez y atrae especialmente a las almas sedientas de la misericordia de Dios, que así encuentran la fuente inagotable donde beber el agua de la Vida capaz de regar los desiertos del alma y de hacer que florezca la esperanza".
Esa solemnidad coincide además con la Jornada mundial de oración por la santificación de los sacerdotes. "Aprovecho la oportunidad -dijo el Santo Padre- para invitaros (...) a rezar siempre para que los sacerdotes sean testigos del amor de Cristo".
Después, el Papa habló de la festividad de San Juan Bautista (24 de junio). "Es el único santo de quien se conmemora el nacimiento, ya que marcó el inicio del cumplimiento de las promesas divinas. (...) Su fiesta nos recuerda que Cristo es el referente de toda nuestra vida, que se realiza acogiéndole como Palabra, Luz y Esposo, de quien nosotros somos voces, velas y amigos".
"Dejar que el "yo" de Cristo tome el lugar de nuestro "yo" -concluyó Benedicto XVI- fue la aspiración ejemplar de los apóstoles Pedro y Pablo, que la Iglesia venerará el próximo 29 de junio".
Una vez rezado el Angelus, el Papa mencionó el accidente ocurrido durante las obras de la autopista italiana entre Catania y Siracusa, en el que falleció un trabajador y hubo varios heridos. "Elevo una oración especial de sufragio y estoy cerca espiritualmente de los heridos y sus parientes -dijo el Santo Padre- y auspicio que se conceda siempre mayor atención a las condiciones de seguridad en el trabajo, para que no se repitan acontecimientos tan dramáticos".
Por último, Benedicto XVI recordó que el domingo que precede a la solemnidad de San Pedro y San Pablo se celebra en Italia la Jornada por la Caridad del Papa. "Agradezco de corazón a la comunidad eclesial italiana sus oraciones y su ayuda a mi ministerio de sucesor de Pedro, llamado a servir a todo el pueblo de Dios".
ANG/SAGRADO CORAZON:SAN JUAN/... VIS 20060626 (430)
No hay comentarios:
Publicar un comentario