CIUDAD DEL VATICANO, 7 JUL 2004 (VIS).-La acogida como misión evangelizadora de la Iglesia, la apertura a otras realidades, la pastoral del turismo desde el punto de vista de los países de acogida, sobre todo del Tercer Mundo, fueron los temas abordados en la tercera jornada del Congreso Mundial sobre Pastoral del Turismo que se celebra en Bangkok (Tailandia) promovido por el Pontificio Consejo para la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes.
"Muchos países, meta de turismo -dijo el arzobispo Raul N. Gonsalves, patriarca emérito de Goa y Damao (India)- han atravesado no sólo la triste experiencia de no recibir los beneficios que esperaban para mejorar sus condiciones de vida, sino la de verse privados de sus recursos naturales y ser defraudados y explotados por las fuerzas del mercado que conciben y capitalizan el turismo como una industria y un negocio". Refiriéndose después a las directrices del dicasterio en el 2001 habló de la "grave injusticia de facilitar a los turistas servicios de los que carece normalmente la comunidad local". El prelado recordó también que una de las formas de explotación más atroces es el turismo sexual.
Nuestra concepción debe ser en cambio, dijo, la de "un nuevo turismo mundial donde las personas enriquezcan sus vidas con encuentros que salvaguarden la dignidad de toda persona, donde se respeten las diversas herencias culturales, se proteja y fomente la integridad del planeta y se potencie la armonía y la paz". Los voluntarios y los grupos eclesiásticos hacen todo lo posible para promover un futuro de esperanza para el turismo, pero su tarea es enorme, subrayó, y los recursos humanos y económicos son muy limitados.
"La acogida como misión evangelizadora", fue el tema de la relación del arzobispo Ramón Benito de la Rosa y Carpio, de Santiago de los Caballeros (República Dominicana), articulada en cinco puntos: la acogida, virtud humana y cristiana; la acogida en la pastoral eclesiástica; la acogida, como signo de catolicidad; la acogida en la industria turística y la acogida en la pastoral del turismo. El diálogo, dijo, es parte de la "espiritualidad de la acogida": "El diálogo impulsado por la Iglesia con todas las naciones, sus culturas y religiones, comienza y progresa con una acogida cordial y continua. (...) Sin la acogida ni hay diálogo, ni puede prosperar".
El padre Jean-Yves Baziou, de la Universidad Católica Occidental de Angers (Francia), tituló su discurso "Dejar el propio hogar para encontrar a otros". "El acto de partir y el acto de encontrarse -explicó- son dos factores del viaje turístico. También son acciones de profundo significado tanto en la existencia humana como en la experiencia cristiana".
DELSS/TURISMO/CON-SM:BANGKOK VIS 20040707 (470)
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