CIUDAD DEL VATICANO, 30 SEP 2006 (VIS).-Benedicto XVI se despidió hoy en el palacio apostólico de Castelgandolfo del obispo de Albano (diócesis a la que pertenece Castelgandolfo), monseñor Marcello Semeraro, de las comunidades religiosas, autoridades civiles y del personal encargado de la seguridad y la vigilancia durante su estancia en la residencia estival.
"Saludo con cariño a los jesuitas de la Specola Vaticana (Observatorio Astronómico Vaticano) -dijo el Papa- y a las comunidades religiosas y laicas, masculinas y femeninas, presentes en Castelgandolfo. En estos meses he sentido su cercanía espiritual y se lo agradezco de todo corazón mientras auspicio que todos correspondan con generosidad renovada a la llamada de Dios, empleando todas sus energías en el servicio del Evangelio".
El Santo Padre dio también las gracias al alcalde, a los representantes del ayuntamiento y a los habitantes de Castelgandolfo, "que demuestran de tantas formas su atención por mi persona y por cuantos transcurren conmigo los meses estivales". Benedicto XVI elogió además la "cortesía y la hospitalidad (...) con los numerosos peregrinos y visitantes que vienen a ver al Papa, especialmente en la cita dominical del Angelus".
Posteriormente se dirigió a los médicos y al personal de la Gobernación vaticana, que "con no pocos sacrificios -dijo- han garantizado su presencia y sus competentes servicios", así como a los miembros de las fuerzas del orden italianas, a los de la Gendarmería vaticana y de la Guardia Suiza Pontificia, que "han garantizado tanto a mí como a mis colaboradores -subrayó- una permanencia tranquila y segura".
"No puedo olvidarme -agregó- de los oficiales y aviadores del XXXI escuadrón de la Aeronáutica Militar que hacen posible mis desplazamientos en helicóptero".
"A todos y cada uno -dijo- mis gracias más sinceras y la garantía de un recuerdo constante en la oración, tanto para vosotros como para vuestros seres más queridos".
Benedicto XVI se despidió a continuación del personal de las Villas Pontificias, "que de alguna manera forman parte de la "familia" del Papa cuando vive en Castelgandolfo", dijo, y de su director, Saverio Petrillo, a quien agradeció su "atención y delicadeza".
"Pido a Dios -finalizó- que os recompense por la dedicación y fidelidad con que lleváis a cabo la tarea que os han confiado".
AC/DESPEDIDA/CASTELGANDOLFO VIS 200601002 (390)
"Saludo con cariño a los jesuitas de la Specola Vaticana (Observatorio Astronómico Vaticano) -dijo el Papa- y a las comunidades religiosas y laicas, masculinas y femeninas, presentes en Castelgandolfo. En estos meses he sentido su cercanía espiritual y se lo agradezco de todo corazón mientras auspicio que todos correspondan con generosidad renovada a la llamada de Dios, empleando todas sus energías en el servicio del Evangelio".
El Santo Padre dio también las gracias al alcalde, a los representantes del ayuntamiento y a los habitantes de Castelgandolfo, "que demuestran de tantas formas su atención por mi persona y por cuantos transcurren conmigo los meses estivales". Benedicto XVI elogió además la "cortesía y la hospitalidad (...) con los numerosos peregrinos y visitantes que vienen a ver al Papa, especialmente en la cita dominical del Angelus".
Posteriormente se dirigió a los médicos y al personal de la Gobernación vaticana, que "con no pocos sacrificios -dijo- han garantizado su presencia y sus competentes servicios", así como a los miembros de las fuerzas del orden italianas, a los de la Gendarmería vaticana y de la Guardia Suiza Pontificia, que "han garantizado tanto a mí como a mis colaboradores -subrayó- una permanencia tranquila y segura".
"No puedo olvidarme -agregó- de los oficiales y aviadores del XXXI escuadrón de la Aeronáutica Militar que hacen posible mis desplazamientos en helicóptero".
"A todos y cada uno -dijo- mis gracias más sinceras y la garantía de un recuerdo constante en la oración, tanto para vosotros como para vuestros seres más queridos".
Benedicto XVI se despidió a continuación del personal de las Villas Pontificias, "que de alguna manera forman parte de la "familia" del Papa cuando vive en Castelgandolfo", dijo, y de su director, Saverio Petrillo, a quien agradeció su "atención y delicadeza".
"Pido a Dios -finalizó- que os recompense por la dedicación y fidelidad con que lleváis a cabo la tarea que os han confiado".
AC/DESPEDIDA/CASTELGANDOLFO VIS 200601002 (390)
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