CIUDAD DEL VATICANO, 17 ABR 2004 (VIS).-Hoy se hizo público un mensaje del Santo Padre a monseñor Walter Brandmüller, presidente del Pontificio Comité de Ciencias Históricas, con motivo del L aniversario de su institución por el Papa Pío XII (7 de abril de 1954).
En el mensaje, fechado el 16 de abril, el Papa pone de relieve la importancia de cultivar "un serio conocimiento histórico de los diversos campos en los que se articula la vida del individuo y de la comunidad. (…) La ignorancia del proprio pasado lleva irremediablemente a la crisis y a la pérdida de identidad de los individuos y de las comunidades".
"La investigación histórica libre de prejuicios y vinculada únicamente a la documentación científica tiene un papel insustituible en el desmoronamiento de las barreras entre los pueblos. A menudo, se han levantado pesadas barreras a lo largo de los siglos a causa de la parcialidad de la historiografía y del resentimiento recíproco. Como consecuencia, actualmente siguen existiendo incomprensiones que obstaculizan la paz y la fraternidad entre los seres humanos y entre los pueblos".
Juan Pablo II afirma que la Iglesia "está vivamente interesada en el conocimiento cada vez más profundo de la propia historia. Con este fin, hoy es más necesario que nunca una enseñanza atenta de las materias histórico-eclesiales, sobre todo para los candidatos al sacerdocio, como recomendaba el decreto 'Optatam totius' del Concilio Vaticano II. Para estudiar con provecho la tradición eclesiástica son absolutamente indispensables conocimientos sólidos de las lenguas latina y griega, sin las que no es posible acceder a las fuentes de la tradición eclesiástica. Sólo con su ayuda se puede volver a descubrir la riqueza de la experiencia de vida y de fe que la Iglesia, bajo la guía del Espíritu Santo, ha ido acumulando en los 2000 años pasados".
MESS/CIENCIAS HISTORICAS/BRANDMULLER VIS 20040419 (300)
En el mensaje, fechado el 16 de abril, el Papa pone de relieve la importancia de cultivar "un serio conocimiento histórico de los diversos campos en los que se articula la vida del individuo y de la comunidad. (…) La ignorancia del proprio pasado lleva irremediablemente a la crisis y a la pérdida de identidad de los individuos y de las comunidades".
"La investigación histórica libre de prejuicios y vinculada únicamente a la documentación científica tiene un papel insustituible en el desmoronamiento de las barreras entre los pueblos. A menudo, se han levantado pesadas barreras a lo largo de los siglos a causa de la parcialidad de la historiografía y del resentimiento recíproco. Como consecuencia, actualmente siguen existiendo incomprensiones que obstaculizan la paz y la fraternidad entre los seres humanos y entre los pueblos".
Juan Pablo II afirma que la Iglesia "está vivamente interesada en el conocimiento cada vez más profundo de la propia historia. Con este fin, hoy es más necesario que nunca una enseñanza atenta de las materias histórico-eclesiales, sobre todo para los candidatos al sacerdocio, como recomendaba el decreto 'Optatam totius' del Concilio Vaticano II. Para estudiar con provecho la tradición eclesiástica son absolutamente indispensables conocimientos sólidos de las lenguas latina y griega, sin las que no es posible acceder a las fuentes de la tradición eclesiástica. Sólo con su ayuda se puede volver a descubrir la riqueza de la experiencia de vida y de fe que la Iglesia, bajo la guía del Espíritu Santo, ha ido acumulando en los 2000 años pasados".
MESS/CIENCIAS HISTORICAS/BRANDMULLER VIS 20040419 (300)
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario